La imputación por la depuradora de Húmera se lleva por delante las aspiraciones políticas de la alcaldesa Quislant

Según ha podido saber Diario de Pozuelo, la toma de declaraciones en la instrucción por el presunto delito medioambiental en la gestión de la depuradora de Húmera no ha hecho más que empezar.

El juzgado número 1 de Primera Instancia de Pozuelo acaba de tomar declaración como testigos a dos funcionarias del Ayuntamiento: Ana Belén Cebrián y Diana García. Pero la jueza que instruye el proceso, Mónica Gómez Ferrer, no da por cerrada la investigación, ni mucho menos. Para empezar ha pedido nuevas comparecencias, en principio el próximo 11 de diciembre, a la empresa que gestiona actualmente la depuradora y a otras que lo han gestionado en los últimos años.

Se ignora si serán las últimas actuaciones que solicite la jueza. La impresión de expertos es que quiere dejar todo atado y bien atado, con todos los testimonios y pruebas posibles.

Un trabajo tan concienzudo va en contra de los intereses de algunos de los políticos imputados en el caso. Para empezar, de la propia alcaldesa, Susana Pérez Quislant, que vería truncadas sus aspiraciones no sólo de repetir como primera edil sino incluso de ir en las listas del PP a la Asamblea de Madrid, como le habría prometido el partido si se echa a un lado para facilitar que se presente otro candidato en Pozuelo.

Tampoco le beneficia en absoluto a otras personas que han estado sonando últimamente como posibles candidatos a la alcaldía por el Partido Popular. Quien les ha dado esperanzas ha sido la propia formación política, al introducir sus nombres en una encuesta de Sigma Dos realizada entre los pozueleros para conocer cuál sería su candidato más viable. De esa lista, además de la alcaldesa, se caerían, por imputados en la EDAR de Húmera, Félix Alba -concejal ya retirado por desavenencias con la alcaldesa- y Yolanda Estrada, la novia del secretario del PP en Madrid, Juan Carlos Vera, quien encargó la encuesta.

Por tanto, se desvanecerían así las perspectivas de poder de algunos, a la par que cobrarían alas las posibilidades de otros, entre los que destaca Enrique Ruiz Escudero, Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, y presidente del PP en Pozuelo.

Además, Somos Pozuelo, la marca blanca de Podemos en la localidad, guarda un as en la manga: personado en la instrucción, cuando la jueza termine esta primera toma de declaraciones, el partido podría solicitar nuevas actuaciones, e incluso nuevas imputaciones.

En cualquier caso, la instrucción se alargará mucho más allá de que el PP nombre a sus candidatos. A buen seguro que no son los ahora imputados, pues los populares no se pueden permitir en Pozuelo que, en caso probable de tener que pactar con Ciudadanos, éstos veten a un posible candidato popular que iría como cabeza de lista en la localidad.

La más perjudicada en este proceso será Susana Pérez Quislant, quien se quedará sin alcaldía y sin puesto en la Asamblea de Madrid.