¿A quién quiere más Quislant, a Aizcorbe o a Macías?

Ayer me empaché de palomitas mientras seguía los resultados de las elecciones. Para los periodistas es un momento de placer, todo un espectáculo, porque conocemos a muchos de los candidatos que se juegan el pan para los próximos cuatro años. Y sabemos de sus limitaciones y de sus virtudes.

Me tenía especialmente en ascuas los resultados en Pozuelo de Alarcón. Estaba cantado que el PP perdería la mayoría absoluta en su tradicional feudo, pero me esperaba un porrazo aún mayor del partido azul: 11 concejales PP -baja tres-, 5 Ciudadanos -se queda igual-, 4 para el PSOE -sube uno- y uno para el cabeza de lista de Somos Pozuelo, que se deja tres por el camino.

Irrumpe con fuerza VOX, aunque yo pensaba que sacaría aún mejores resultados. Quizá porque el programa, a mi modo de ver, era flojito. Aún así, ha pasado de 0 a 4 concejales.

Y ahora la pregunta del millón. Si la mayoría absoluta en Pozuelo son 13 concejales y el PP sólo ha obtenido 11… ¿Con quién pactarán?

Siguen los nervios, hasta el sábado 15 de junio cuando se constituya la nueva corporación municipal.

¿A quién prefiere como sustento de gobierno la alcaldesa Quislant? ¿A papá o a mamá? ¿A Juanjo Aizcorbe, de Vox, o a Damián Macías, de Ciudadanos? ¿El madurito y experimentado o el jovencito guapete poco ducho en Pozuelo?

Me parece que el apoyo natural del PP en estas circunstancias debería ser Vox, porque la mayoría de sus votantes se los ha arrebatado más al PP que a Ciudadanos. Aunque creo que Quislant estaría más cómoda con Damián que con Juanjo.

¿Entrará Vox en el gobierno de Pozuelo? Me despiporro. No me imagino a la portavoz del PP abroncando a Aizcorbe como hace con otros concejales de su partido.

Un favor: que alguien grabe las conversaciones sobre los futuros apoyos y pactos de gobierno. La alcaldesa Quislant no es muy dada al consenso y le mola el ordeno y mando. Por eso la negociación -parece que lo estoy viendo- será tensa en algunos momentos. Más fácil con Macías que con Aizcorbe.

Después de todo, el Partido Popular de Pozuelo ha salvado los muebles bastante bien… No me lo explico, pero así es. Hay mucho votante que ha vuelto al redil azul, pensando en clave nacional. Por eso creo que estos resultados no son un premio para la gestión de Quislant. Perder tres concejales no es un galardón. Reconocimiento es ganar dos concejales y obtener la mayoría absoluta, como ha ocurrido en la vecina Boadilla del Monte.