El exconcejal Sáenz, visto para sentencia del capítulo 1 de Gürtel, “deseoso de pasar página y retomar mi vida”
Sólo cuatro de los 37 acusados por los primeros años de actividades de la trama Gürtel, comprendidos entre 1999 y 2005, han solicitado dirigirse al tribunal de la Audiencia Nacional que les juzga. Es el caso de José Antonio Sáenz, exconcejal de Pozuelo de Alarcón, para el que se pide dos años y tres meses de prisión.
En su intervención, Sáenz ha leído un escrito en el que repetía "una vez más" su "inocencia" y "honradez". Al igual que los otros acusados ha afirmado que, tras conocerse su imputación, le despidieron de su trabajo de forma "fulminante" y su "carrera pública se desvaneció". Se refería en concreto a su cargo de Director de Promoción de la Empresa municipal de la Vivienda de Getafe. El entonces alcalde, Juan Soler, destituyó de manera fulminante a Saenz cuando se conoció su imputación en Gürtel, como informó en su día Diario de Pozuelo.
El exconcejal pozuelero afirmó también en su alegato ante el tribunal que "desde el primer momento" ha colaborado con la justicia y que nunca ha tenido intención, ni ha sido "consciente de hacer nada ilegal". Saenz dijo estar deseoso de "pasar página y retomar mi vida".
Resto de alegatos
Todos los intervinientes han pedido que tenga en cuenta el perjuicio personal y profesional que les ha supuesto la presión mediática que ha tenido este caso de corrupción desde que estalló en 2008.
Concretamente, se trata además de Juan José Moreno, exconcejal en Majadahonda; Jesús Merino, exdiputado por Segovia, y el cabecilla de esta red corrupta, Francisco Correa.
El denunciante de la trama Gürtel y también exconcejal de Majadahonda, José Luis Peñas, ha tenido que renunciar a este derecho ya que no podía asistir ese día al juicio.
Antes de comenzar estos últimos alegatos, el magistrado Hurtado, les ha explicado que este turno sirve para "matizar algo que se quedara colgando" pero no para "repetir" lo que ya manifestaron en sus declaraciones.
Juan José Moreno, exconcejal en Majadahonda, se enfrenta a 24 años y dos meses, es uno de los delatores de la Gürtel. Ha afirmado que todos los viajes que se sospechan que son irregulares están "todos pagados en metálico" y que no entiende su "presencia" en este procedimiento.
Moreno también ha recalcado el "calvario" que dice haber sufrido desde que se le imputó en mayo de 2009 y que dos de los testigos que propuso no han querido comparecer por la "presión mediática".
Con las declaraciones de esta semana, el juicio de esta primera etapa de Gürtel, la red corrupta liderada por el empresario Francisco Correa, queda visto para sentencia.
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