El interventor municipal deniega subvenciones previamente autorizadas por el Ayuntamiento de Pozuelo

Un total de once asociaciones culturales del municipio se presentaron a la convocatoria de subvenciones del año 2016, organizada por el Patronato municipal de Cultura, dotada con una aplicación presupuestaria de 57.000 euros.

Después de que, tanto el órgano instructor como el Consejo Rector, hayan emitido los correspondientes informes y aprobaciones, y después de que algunas asociaciones se gastaran el dinero concedido, ahora el interventor municipal emite una resolución de denegación de reconocimiento de la obligación de pago de la subvención a algunos de los proyectos presentados. La historia es algo intrincada. Veamos los motivos que aduce este funcionario municipal.

El 16 de septiembre el órgano instructor del Patronato de cultura emite un informe por el que se afirma que las asociaciones presentadas a la subvención cumplen todos los requisitos establecidos en la base primera, pero detectan que hay dos asociaciones que incluyen en sus proyectos gastos que no son subvencionables, como el uso de un local de ensayos para La Unión Musical de Pozuelo y la compra de un ordenador para la Casa de Extremadura.

Con fecha 26 de octubre, el Consejo Rector del Patronato de Cultura acuerda conceder las subvenciones. En este máximo órgano de dirección del Patronato están representados tanto el gobierno municipal como todos los partidos de la oposición.

Las asociaciones culturales a las que se les concede formalmente la subvención son La Inseparable (13.637 euros), la Unión Musical de Pozuelo (7.431 euros), la Casa de Extremadura (7.290 euros), el Ateneo de Pozuelo (5.829 euros), la asociación Paular de Pozuelo (4.605 euros), Coral Kantorei (4.415 euros), Cauro (4.000 euros), Ars Musicae (3.336 euros), Pozuelo Piensa (3.000 euros), Enki (1.954 euros), y La Poza (1.500 euros).

Se comunica a los interesados que su proyecto ha sido aprobado y se le informa también de la cuantía de la subvención concedida, que no puede exceder del 50% del coste total del proyecto. Por tanto, la asociación debe hacer también una inversión.

Lo lógico y normal es que, una vez comunicadas formalmente por el Ayuntamiento las subvenciones asignadas a cada asociación, éstas continúen con el proyecto, y sigan invirtiendo en la seguridad de que la mitad del dinero gastado volverá a sus arcas. También es razonable pensar que muchas asociaciones no llegarían a desarrollar proyectos tan complejos si no tuvieran la seguridad de recuperar parte del dinero.

Una vez que las asociaciones objeto de la subvención han realizado los gastos correspondientes a los que se han comprometido en la solicitud de subvención, deben justificar el 100% de los gastos, haciendo llegar al ayuntamiento tanto las facturas abonadas para la realización del proyecto, como la justificación de su pago.

Es a partir de ese momento cuando entra en escena la Intervención Municipal, órgano encargado de consignar que las facturas corresponden a los gastos para los que se otorgó la subvención. Dado el visto bueno del interventor, José Luis San Segundo, se procede a su abono hasta la cantidad otorgada en la subvención.

En la última convocatoria de subvenciones culturales, el interventor municipal ha denegado total o parcialmente, según consta en respuesta escrita solicitada al Pleno municipal del mes de enero por el Grupo Municipal Somos Pozuelo, "proyectos basados en la creación y promoción del Teatro inclusivo, en la difusión de la cultura generada por asociaciones culturales a través de una página web, en la celebración de actividades y representaciones de bailes regionales dentro y fuera del municipio, en la edición de una revista cultural y en la práctica de la música con instrumentos de cuerda tradicionales".

La Asociación Cauro pierde los 4.000 euros ya gastados

Pero vayamos con un ejemplo práctico para comprobar cómo el interventor San Segundo podría estar extralimitándose en sus funciones fiscalizadoras. Contactamos con la Asociación Cultural Cauro, que lleva colaborando con Diario de Pozuelo desde hace años en la elaboración de las informaciones locales.

La citada asociación tiene por objeto en sus estatutos fomentar, a través de la actividad periodística, "la participación ciudadana [...] la difusión de la cultura y el patrimonio cultural". El proyecto que han presentado en esta pasada convocatoria ha sido tumbado por el interventor porque no reúne, a su juicio, los requisitos fijados en la base primera de la convocatoria.

El proyecto presentado es una propuesta de página web, en la que las asociaciones culturales del municipio puedan publicar por sí mismas, y sin necesidad de intermediarios, las noticias y actividades que realizan en el municipio, al objeto de dar una visibilidad mucho mayor a lo que hacen.

Tanto el órgano instructor de la convocatoria, como el Consejo Rector del Patronato de Cultura proponen y deciden que se otorgue la subvención al proyecto. La Asociación Cauro decide realizar la inversión contando con que el 50% de los gastos que se originen serían cubiertos por esa aportación municipal.

Sin embargo, cuando se hace efectiva la entrega de las facturas para obtener su reintegro, la intervención municipal que dirige San Segundo la deniega, contradiciendo de manera expresa las decisiones del máximo órgano de Cultura.

En los reparos emitidos por este órgano fiscalizador va más allá de la mera comprobación de que las facturas se ajustan al proyecto, y enmienda la decisión al Consejo Rector del Patronato de Cultura. El interventor llega a afirmar en su justificación que, aunque se "acordó aceptar el citado proyecto como subvencionable cuando es evidente que el mismo no reúne los requisitos exigibles contenidos en la base primera, y en consecuencia debía haber rechazado dicho proyecto al no estar dentro de las finalidades y competencias previstas en las Bases de la Convocatoria. Al no reunir el proyecto los requisitos exigibles como subvención de carácter cultural, no procede entrar a valorar las facturas presentadas por dicha Asociación de creación de una plataforma web", afirma el escrito de intervención.

La perplejidad aumenta cuando acudimos a consultar la naturaleza de los proyectos subvencionables, recogidos en la base primera de la regulación de la concesión de subvenciones del Patronato de Cultura, a la que hace referencia explícita la denegación municipal del pago.

En el primer punto de esa base primera dice textualmente que serán proyectos subvencionables "exposiciones, conciertos, edición de publicaciones, conferencias, grupos de teatro y danza [...] y, en general, todos aquellos proyectos que completen la programación cultural del Patronato Municipal de Cultura [...]".

Desde la asociación han manifestado el estupor ante la decisión de esta intervención municipal. No entienden cómo es posible que, una vez otorgada una subvención y realizado el gasto para el que ha sido autorizada, el propio ayuntamiento, a través de su órgano fiscalizador, sea capaz de denegarla. Lo razonable, afirman, es que ese filtro se aplique cuando toca decidir si otorgar la subvención, y no cuanto toca pagar.

"Son muchos los perjuicios que nos han ocasionado, y no es el primer año que quedamos a merced de estas arbitrariedades", afirman. Por eso están valorando la posibilidad de interponer un recurso contencioso-administrativo ante los juzgados de Madrid.