Qué puertas son más difíciles de abrir y por tanto más seguras
Las puertas más seguras implican mayor protección y, por tanto, mayor dificultad a la hora de abrirlas por alguien que no sea un experto.
En este sentido, lo primero que hay que saber y tener en cuenta es que las puertas de seguridad son bastante diferentes a las puertas tradicionales o convencionales. Las puertas que se conocen como de seguridad, son las puertas blindadas o acorazadas.
Las puertas acorazadas disponen de mecanismos que ofrecen una mayor robustez y seguridad en comparación con las blindadas. Su fabricación es en acero, lo que implica mucha más resistencia. Esto incluye tanto los marcos como la hoja, aunque por razones estéticas, la hoja de la puerta acorazada suele estar revestida con madera. En cuanto a las bisagras, en este tipo de puertas van soldadas o ancladas al marco de acero.
Como se puede ver, con una puerta así, si se necesitara un servicio de apertura de puertas en Madrid habría que acudir a cerrajeros expertos, pues no es fácil abrir una cerradura de este tipo de puertas. En este tipo de puertas, de hecho, lo habitual es que haya varias cerraduras con sus respectivas llaves.
Qué diferencia hay entre una puerta acorazada y una blindada
Partiendo de que ambos tipos de puertas son bastante seguras. Cada una de ellas tiene unas características concretas que la diferencian del resto de puertas convencionales y de la otra puerta de seguridad. A continuación, se detallan las principales características a través de las cuales se darán a conocer las diferencias:
- Puertas blindadas. A diferencia de las acorazadas, este tipo de puerta no es íntegramente de acero. Están fabricadas con un refuerzo metálico en la hoja, pero no tienen toda su estructura de acero, de ahí que sean más económicas. Las puertas blindadas son ideales para todo tipo de viviendas, tanto pisos, como adosados. Aunque, más económicas que las acorazadas, su grado de resistencia es bastante bueno, aunque ligeramente inferior.
- Puertas acorazadas. Cuentan con una hoja y un marco totalmente de acero. Son, con diferencias las más seguras, por eso se usan en viviendas, locales e inmuebles cuya puerta de entrada se encuentra en el exterior, o están demasiado expuestas. Sin duda, son las más resistentes del mercado, tanto a los agentes atmosféricos como a los delincuentes. Eso sí, el precio es algo más elevado, pero porque la calidad y seguridad también es más alta.
Importancia de la cerradura
No basta con tener una puerta de calidad, la cerradura es el punto principal de seguridad de una puerta. Por este motivo, la elección de la cerradura es crucial. Entre los distintos tipos de cerraduras que se pueden encontrar, las hay de diferentes calidades, incluyendo las digitales, recientemente incorporadas. No es lo mismo una cerradura de pomo que una de gorjas, o una embutida. Cada una de ellas aporta unos niveles de seguridad y robustez diferentes.
Incluso hay cerraduras antibumping, que ofrecen la máxima seguridad. Estas se caracterizan por estar diseñadas para evitar que los delincuentes utilicen el bumping para forzar la cerradura y por ende la puerta de acceso. Este tipo de cerraduras son perfectas para locales comerciales, negocios, puertas de viviendas de zonas donde suelen haber robos, y en general si se quiere garantizar la seguridad del hogar.
Ahora bien, la tecnología ha hecho posible las cerraduras inteligentes. Una nueva gama de cerraduras que son más habituales en oficinas, hoteles y espacios públicos que funcionan de manera digital. El acceso está controlado por una clave numérica o sensores biométricos. Estas cerraduras de seguridad se bloquean inmediatamente si detectan que se está intentando acceder de manera no autorizada.
¿Cómo conseguir una puerta de entrada más segura?
Además de contar con una puerta de calidad y una cerradura de calidad. Especialmente las puertas convencionales, con cerraduras convencionales, deben ser revisadas periódicamente para hacerles el mantenimiento adecuado. Conviene recordar que la seguridad es una de los aspectos que más preocupa a la mayoría de las personas hoy en día. De ahí que cada vez se utilicen más los servicios de cerrajeros expertos para garantizar el buen funcionamiento de todo tipo de cerraduras.
El buen mantenimiento de puertas y cerraduras forma parte de la rutina necesaria para alagar la vida de las mismas y garantizar la seguridad de los ocupantes de la vivienda o inmueble. Ahí es donde entran las empresas de cerrajería, pues sus profesionales cuentan con los conocimientos suficientes para saber qué necesita una cerradura, si es una reparación o, por el contrario, conviene hacer una sustitución inmediata.
Sea como fuere el tipo de puerta con el que se cuente, ante cualquier fallo de funcionamiento o desperfecto, no es conveniente alargar la situación, puesto que los delincuentes pueden aprovechar el más mínimo fallo de seguridad para forzar la cerradura y acceder al inmueble con las consiguientes consecuencias negativas para los ocupantes de la vivienda o dueños del negocio.
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