Los mil millones de Ossorio

Resulta sorprendente que todo el mundo esté de acuerdo en decir que el Gobierno de Ignacio González es continuista. Lo dice el PP, lo dice el PSOE y lo dicen los de IU. No me explico cómo alguien pudo llegar a pensar lo contario. La Comunidad de Madrid tiene los problemas que tiene y no porque haya cambiado la Presidencia iba a cambiar necesariamente la forma de abordarlos. Y menos cuando Ignacio González era la mano derecha de Esperanza Aguirre">Esperanza Aguirre. Blanco y en botella.

Y, entre esos problemas, el principal es la necesidad cerrar los presupuestos para 2013. Unos presupuestos en los que la Región no podrá contar con 992 millones (1.000 en números redondos) que asegura le debe el Estado y que el Estado no le va a abonar, lo que supone un 8% menos que en 2012. Cantidad a la que hay que añadir un recorte de 1.500 millones correspondientes al 0,7%, obligado por el objetivo del déficit. Cantidad final que resulta, prácticamente, imposible de cuadrar.

La Comunidad de Madrid por IVA, renta e impuestos especiales recauda 66.000 millones de euros para el Estado y recibe 14.000 a cambio. Cifra que no corresponden al 50% del IVA, 55% de la Renta y 60% de Impuestos especiales, ya que, si se hace la operación faltan, más-menos, 1.000 millones de euros.

Pero lo curioso es que quien hizo estas cuentas fue Enrique Ossorio, el Secretario General de Coordinación Autonómica y Local del Ministerio de economía y Hacienda, precisamente, la persona que acaba de ser nombrado ahora Consejero de Economía y Hacienda del Gobierno de Ignacio González.

Ossorio era el que se negaba a darle esos mil millones a la Comunidad de Madrid y sus guerras por ellos contra Percival Manglano han sido épicas. De hecho, hay quien dice que la llegada de Enrique Ossorio a la Consejería de Economía y Hacienda de la Comunidad de Madrid se debe a un acuerdo entre Beteta y González para calmar esas aguas y que la petición de los mil millones no pasase a mayores en una España convulsa autonómicamente hablando.

Pero la pregunta es: ¿Cómo se va a solucionar Ossorio este sudoku?

Me temo que mal. La cosa tiene mala solución pese a que Ossorio sea un experto en cerrar presupuestos autonómicos y presuma de haberlos hecho durante 10 años en la propia Comunidad de Madrid. Pero lo va a tener complicado si no se suben los impuestos. Y eso es imposible para un liberal como Ignacio González. Y el problema es que, escasamente, le queda un mes para hacerlo.

¿Asistiremos a un nuevo milagro de la multiplicación de los panes y los peces? ¿Saldrá el dinero que falta de los 2.700 millones que Madrid da para el fondo de solidaridad nacional o tendrá que hacer como Cataluña y poner la mano?

La respuesta correcta en cuestión de días.

Antonio L. Rodríguez

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