El pádel se dispara al estrellato
Si hay un deporte al alza, ese es el pádel. Agustín Tapia, Arturo Coello, Paquito Navarro, Franco Stupaczuk, Martín Di Nenno, Federico Chingotto, Momo González, Sanyo Gutiérrez.
La lista es muy larga, cada vez más, cuando se trata de jugadores de pádel elevados a estrellas planetarias en el deporte del 'veinte por diez'. Hace no tanto, sólo los legendarios Fernando Belasteguín, Juan Martín Díaz o Pablo Lima trascendían fronteras y sufrían de idolatrías, ahora, especialmente en los dos últimos años, el 'boom' es brutal. Y es que, el pádel ya fue el deporte con mayor crecimiento a nivel mundial en 2022 y la dinámica ha seguido siendo alcista.
Así lo alumbraba un informe desarrollado por Deloitte, en sociedad con Global Padel Report y Playtomic. La aparición del circuito Premier Padel, auspiciado por la Federación Internacional de Padel (FIP) y con el apoyo de la Professional Padel Association (PPA, asociación de Jugadores), ha provocado incluso que desaparezca World Padel Tour, el esqueleto del crecimiento durante la última década. Un salto que va a disparar al pádel en cuanto a repercusión y también en lo económico. En las principales casas de apuestas deportivas, los nombres de Tapia, Coello y compañía van apareciendo, aunque no llegan a la dimensión del Fútbol, el baloncesto o el hermano mayor de nuestro protagonista, el tenis. Pero paso a paso. Hace escaso tiempo, era inimaginable que se celebrase un campeonato de pádel en Roland Garros o en el Foro Itálico de Roma... Que los amantes de las apuestas encuentren cada vez más variables sobre el deporte de la pala en su casa favorita es una evidencia.
Y 2024 promete ser el año del trampolín definitivo. Esa aparición de Premier que adelantábamos es la cerilla del cambio. Tras un 2023 donde compaginar el circuito financiado por Qatar Sports Investments (QSI) con el ya parte del pasado World Padel Tour resultó en una carga de torneos casi inasumible para los jugadores, 2024 y su nuevo calendario se presentan como la nueva normalidad. Mayor apuesta económica, con el consiguiente incremento en los premios y la posibilidad de que los jugadores tengan equipos de trabajos más amplios (fisioterapeutas, entrenadores, preparadores físicos, nutricionistas, psicólogos deportivos...). Un cóctel que promete potenciar un espectáculo ya de por sí atrayente. No se entendería de otra forma que el ascenso meteórito de un pádel disparado hacia el éxito.
Pozuelo, cuna del pádel
Es algo palpable esa evolución. Los clubes de pádel aparecen a la velocidad de la luz, impulsados por la demanda imparable. Pasear por lugares como Pozuelo de Alarcón va acompañado del 'tac, tac, tac' de las palas. 'Pozuelo Padel Club', 'Mad4Padel', 'Somosaguas Padel Club' o 'Padel Bularas' son algunos de los principales aglutinadores de pistas de un municipio, el madrileño, que representa uno de los centros neurálgicos en la capital de España del deporte creado por Enrique Corcuera allá por 1962 en México. Mucho ha llovido desde entonces, muchísimo se han desarrollado las condiciones y la tecnología. Como en todos los deportes, claro. Pero nadie compite con el pádel en los últimos años en materia de crecimiento.
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