Cómo aumentar el valor profesional con el MBA de la Cámara de Comercio de Madrid
España es uno de los países en los que el desempleo estructural siempre ha estado por encima de la media con respecto a los países vecinos. En el momento de escribir estas líneas, el paro toca un mínimo histórico en los países de la zona euro, con un 6,2%.
En España, sin embargo, los niveles alcanzan el 13,5%. Una radiografía que nos ayuda a entender por qué si la formación especializada siempre es un factor determinante en términos de inserción laboral, en España lo es todavía más. Con un mercado laboral que no se caracteriza por lo estable que es en otras economías.
Sin embargo, ¿cómo se puede lograr una mayor especialización y una formación aplicada a diferentes áreas de negocio que nos permitan asentar nuestra carrera laboral? Durante los últimos años, estudiar un Máster MBA (Máster en Dirección y Administración de empresas) se ha convertido en una de las inversiones por las que se decantan un mayor número de alumnos que confían en la Cámara de Comercio de Madrid como el organismo ideal para impulsar su carrera profesional. En este artículo analizamos algunos de los elementos que nos van a permitir conocer cómo el estudio del MBA de la Cámara de Comercio puede ayudar a aumentar nuestro valor profesional y tener un perfil profesional altamente competitivo acorde a las exigencias del mercado actual.
Innovación aplicada a la gestión empresarial
El mercado laboral ha interiorizado el concepto de innovación como parte fundamental de su ADN. La irrupción de la pandemia ha concienciado a las empresas de lo importante que pueden llegar a ser las nuevas tecnologías no solamente para vender más, sino también para hacerlo mejor. Actualmente, disponemos de una gran cantidad de herramientas y de aplicaciones que nos permiten conocer mucho más a nuestros clientes. El comercio electrónico cuenta con una gran cantidad de ventajas, pero de entre todas ellas, es la información que se extrae de los diferentes puntos de contacto una de las principales. Analizando estos datos de manera correcta, logramos optimizar nuestros flujos de venta a un nivel superior.
Y es en este escenario cuando el estudio de un MBA puede proporcionar a las compañías profesionales que cuentan con el expertise que necesitan para desarrollar su capacidad de análisis al mismo tiempo que instauran nuevos flujos de trabajo a partir del desarrollo de las habilidades técnicas que son necesarias para llevar a cabo una gestión eficaz de la empresa de cualquier tamaño y sector de actividad.
En el caso del MBA en Madrid de la Cámara de Comercio, nos encontramos con un programa de formación de primer nivel que derrotó uno de los grandes desafíos a los que siempre se ha tenido que enfrentar el panorama formativo de nuestro país: la falta de práctica. Por ello, todo el programa docente está orientado hacia el aprendizaje práctico. De este modo, todas las posibilidades que se desprenden de la innovación pueden ser aplicadas de manera inmediata en el trabajo diario.
Más allá de la empleabilidad
Por las características particulares con las que cuenta el MBA de la Cámara de Comercio de Madrid, nos encontramos ante un programa formativo especializado que no sirve únicamente para mejorar la empleabilidad de las personas que se encuentran en búsqueda de emprender nuevos caminos profesionales. También sirve para todos aquellos empresarios, directivos o mandos intermedios que ya cuentan con una gran experiencia tras de sí pero que, ahora, quieren adaptarse al nuevo contexto que rodea a lo relacionado con el sector profesional del que forman parte. Por otro lado, claro está que cada vez se abre mayor espacio a las iniciativas emprendedoras con propuestas innovadoras cuyos gestores se convierten igualmente en generadores de empleos.
Históricamente, los Master of Business Administration (MBA) siempre han sido uno de los programas que han permitido la consolidación y expansión de aquellos perfiles interesados en seguir creciendo profesionalmente abarcando una gran cantidad de áreas de trabajo relacionadas con la gestión y dirección de organizaciones. Ahora, gracias al esfuerzo que se ha llevado a cabo desde las entidades especializadas, como son las Cámaras de Comercio, su aplicación en el mercado laboral tiene un mayor impacto de lo que nunca antes había tenido.
En referencia al peso que tiene la formación de los empleados, importantes empresas madrileñas confían en el MBA de Cámara de Comercio de Madrid para que sus trabajadores mejoren su calificación y competencias específicas. Está constado que la inversión en formación influye directamente en la trayectoria profesional de las personas contribuyendo a un mayor compromiso con el desarrollo de sus actividades profesionales y laborales, en general. Además, las empresas obtienen a medio plazo rentabilidad económica de invertir en formación al contar con trabajadores con conocimientos de alto valor en materias financieras, organizativas, comerciales, operativas o de planificación estratégica.
El MBA como recurso para aumentar el valor profesional
Hemos seleccionado una serie de atributos que te permitirán conocer cómo crear valor profesional a partir de titularse con MBA puede resultar especialmente efectivo.
- Los MBA permiten adquirir los conocimientos necesarios para crecer internamente en las empresas. Ayudando a la promoción interna asumiendo nuevas responsabilidades en las que aplicar los conocimientos adquiridos.
- Además, también nos permite mejorar las expectativas de nuestro futuro laboral. Un aspecto especialmente destacado en determinados países, como el nuestro, con el nivel de tasas de desempleo con las que cuenta.
- Gracias a que se trata de un programa muy completo que abarca una gran cantidad de áreas, a través de un MBA podemos reorientar nuestra carrera profesional hacia escenarios más favorables en los que poder completar nuestra experiencia laboral.
El MBA de la Cámara de Comercio de Madrid nos permite incorporar nuevos conocimientos, habilidades y destrezas con las que redefinir por completo el nivel operativo y de productividad de una gran cantidad de empresas y conducirlas hasta una situación cada vez mejor. El objetivo final es optimizar los procesos y mejorar las posibilidades de desarrollo con las que cuentan tanto los propios profesionales como las empresas de las que forman parte.
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