Un usuario agrede a una trabajadora municipal en el Polideportivo El Torreón tras recordarle las normas anti-covid

Según ha podido saber Diario de Pozuelo de fuentes bien informadas, el pasado lunes se produjo en el Polideportivo El Torreón una agresión -un empujón- de un usuario a una trabajadora por hacer cumplir el protocolo covid del Ayuntamiento de Pozuelo en las instalaciones deportivas.

El ataque del usuario se produjo en el punto de control del polideportivo El Torreón, cuando una trabajadora municipal le advirtió que sólo podían entrar en la instalación los deportistas, no así los acompañantes. Según ha confirmado este periódico, es mandato municipal, como medida anti-covid, que en las instalaciones deportivas públicas sólo permanezcan las personas que van a hacer deporte, y no está permitido el acceso a los acompañantes.

Según se comenta entre los trabajadores municipales, éstos están enojados porque, al parecer, políticos, jefes y coordinadores son informados de que los usuarios incumplen con mucha frecuencia las medidas anti covid, pero los responsables no dan soluciones.

Es frecuente, sobre todo durante los fines de semana, que instalaciones deportivas como el Valle de las Cañas reúnan a gran cantidad de personas, sin que ningún responsable municipal tome las medidas oportunas, poniendo en riesgo la salud de todos, incluidos los propios trabajadores.

Sin ir más lejos, el fin de semana pasado se habían reunido en esta instalación deportiva más de 200 personas, que no eran deportistas sino visitantes y acompañantes de los deportistas. Se desperdigan por toda la instalación: en la entrada del polideportivo, en los paseos de acceso a las instalaciones, por las gradas...

Los propios usuarios son los que escuchan las quejas de los trabajadores del polideportivo. Dicen que todos los días se informa a los superiores de todas las anomalías que se producen, especialmente los fines de semana, que los responsables están informados a través de los Correos electrónicos que les envían los trabajadores, pero al parecer no se toma ninguna medida.

Las agresiones más habituales que reciben los trabajadores ante alguno de estos visitantes desaprensivos son verbales como insultos, amenazas, etc., y en ocasiones como esta un empujón.

Eso sin contar con que, además de las medidas de seguridad que los trabajadores intentan hacer cumplir a los visitantes, también tienen que dedicarse a recoger las latas de cerveza tiradas por doquier. En concreto este domingo se dedicaron a recogerlas de los vestuarios de las jugadoras de rugby, que habían celebrado la victoria dentro de uno de los vestuarios.