Una respuesta escrita de Magide que vale oro analizando su firma

Qué triste el destino de la avispa. El lector sabrá que nosotras comemos néctar de las flores, cuando lo encontramos. Pero en invierno todo nos vale: frutos caídos, insectos, carroña… qué más da.

Y buscando y buscando, me dio por leer las preguntas y respuestas escritas del último Pleno municipal. No excitó mi curiosidad nada de lo que leí. Pero me llamó poderosamente la atención una de las respuestas escritas que daba el concejal Luis Magide, responsable de economía en Innovación del Ayuntamiento de Pozuelo.

Me quedé absorta contemplando su firma, que llenaba buena parte del folio. Ya ves, menuda estupidez, querido lector.

Pero quise ir más allá y busqué un grafólogo baratito. Esa rúbrica albergaba gato encerrado. Al menos me lo pareció. Y pedí un incipiente estudio. Si pago más, cosa que no descarto, me dará más datos.

Y aquí va el resultado:

“La primera letra muy alta, lo que indica una lucha por mejorar su imagen personal.

Se aprecia también cierta vanidad y confianza en sí mismo. Se considera  superior a los demás. 

También hay rasgos de buena memoria. La rapidez en la escritura manifiesta energía y dureza en el trabajo y en todas las manifestaciones volitivas. Es decidido.

Su firma es simplificada, propia de personas con temperamento analítico y con tendencia a la síntesis. Tiende a economizar esfuerzo y ganar tiempo.

Inteligencia práctica y despierta. Cierta impaciencia, que le lleva a abarcar muchas cosas en lugar de concentrarse en una. 

La rúbrica cubre el nombre. Implica la acción de ocultarse uno mismo ante los demás. Puede significar incomodidades ambientales y puede indicar un cierto sentimiento de inferioridad, tras esa lucha constante por mejorar su imagen”.

En toda la diana. Por las cosas que me llegan desde la última planta del edificio Innpar, voy a convertir a este grafólogo en mi analista de cabecera.