Estas son las claves para mantener a tu gato sin parásitos intestinales
Los gatos son uno de los animales más adorables. Nos ronronean, nos miman, nos siguen y en definitiva, nos quieren.
Todo ello es a causa de un proceso de varios meses en el que humano y gato se conocen, interactúan y se cuidan entre ambos. En el aspecto de los cuidados, todas las personas que tenemos un gato a nuestro cargo, sabemos que tienen algunos que son básicos. Entre ellos, destacamos la desparasitación interna en gatos, vital para eliminar los parásitos que se hallen dentro del aparato digestivo. En caso de que no lo realicemos frecuentemente, podremos observar cómo su salud empeora e incluso, podría afectar a otros animales y a nosotros mismos.
¿Cuáles son los tipos de parásitos en gatos?
Cuando tenemos un gato, queremos que esté con nosotros lo más feliz y saludable posible. Para ello, debemos informarnos de cuáles son los aspectos más destacados que pueden afectarles para así encontrar la mejor solución posible. En el ámbito de los parásitos, es fundamental conocer cuál es la tipología que existe, así como la diferencia que hay entre ellos.
En cuanto a los parásitos internos, son los que se encuentran en el intestino de los gatos. Lo más común, es observar gusanos intestinales y protozoos. En estos casos, encontramos remedios para la desparasitación muy efectivos: comprimidos, pipetas o bien, el empleo de pastillas.
En el caso de los gatos recién nacidos, el contagio de gusanos redondos en el intestino se puede producir al ingerir huevos de toxocara cati o bien, al ingerir la leche de una gata que esté infectada. Para los adultos, los signos que se observan son: vómitos, diarrea, pérdida de apetito o bien, estreñimiento.
En el caso de la tenia, también encontramos cómo es un parásito intestinal común. Se encarga de absorber los nutrientes que ha ingerido el gato, pero no hay que preocuparse. En estos casos, este tipo de infecciones no suelen ocasionar enfermedades que sean muy graves.
Por último, es necesario hablar de los anquilostomas. Se trata de gusanos delgados que viven en las paredes de los intestinos y que se alimentan de la sangre del gato. La infección en adultos, se suele producir por larvas en la piel o el lamido de zonas que estén contaminadas. Para los más pequeños, el contagio suele ser por la leche infectada, que puede provocarles anemia o que fallezcan.
¿Cuándo es recomendable desparasitar a un gato?
Generalmente, los veterinarios recomiendan proceder a la desparasitación de los gatos frecuentemente. En caso de que tengamos un gato recién nacido, lo que recomiendan es hacerlo entre el primer mes y los cuatro meses de vida. En el momento en que el felino es adulto, este procedimiento es recomendable realizarlo cada trimestre.
En caso de que no se realizan las actuaciones pertinentes para eliminar los parásitos internos, podríamos observar en nuestro gato anemia o bien, causarle la muerte en caso de que no sea tomado en serio el tema y con urgencia.
Por todo ello, el mejor aliado es un remedio efectivo contra los parásitos intestinales. Ahora que conocemos cuál es la tipología de los intestinales, las consecuencias y los remedios, es el momento de llevarlos a cabo para disfrutar de nuestro gato y verlo completamente sano y feliz.
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