Desarticulada una banda que actuaba en Pozuelo
La investigación comenzó el pasado mes de junio por parte de la policía Judicial de Majadahonda, al detectar un aumento de los robos a la salida de ciertos bancos. De hecho, los integrantes de la banda vigilaban las sucursales bancarias, desde las que llamaban a sus compañeros. Ellos se encargaban de seguir hasta zonas poco concurridas a los clientes que más dinero habían sacado, llegando a conseguir botines de hasta 30.000 euros.
Los arrestados también utilizaban otros métodos, como tirar chinchetas bajo los coches para pinchar las ruedas y que los conductores tuvieran que detener sus vehículos o lanzar monedas en la calle para distraer a las víctimas.
De momento, el juez encargado del caso ha decretado la puesta en libertad con cargos de los integrantes de la banda y dos de ellos han ingresado en el Centro de Internamiento de Extranjeros -CIE- de Aluche.
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