Un centenar de comerciantes protestan frente al Ayuntamiento por las obras de Pozuelo Pueblo

El lunes 2 de febrero, los comerciantes de Pozuelo Pueblo habían previsto un acto protesta entre las 11:00 y las 12:00 de la mañana, que supondría el cierre de sus locales, así como una manifestación en la Plaza del Ayuntamiento. Según GenteDigital, el 90% de los establecimientos convocados cumplieron el cierre, y cerca de un centenar de vecinos se reunieron frente al Consistorio.

Las obras comenzaron en junio de 2008 y los cortes viarios se han llevado a cabo desde octubre. El primer teniente de alcalde, Gonzalo Aguado, en declaraciones a Diario de Pozuelo, admite que las obras «llevan un retraso de unos tres meses» debido a una adecuación técnica de las mismas, ya que, «a petición de los propios vecinos, se incluyó en el proyecto un segundo túnel –además del previsto para la calle Béjar– de comunicación Este-Oeste».

El alcalde recibió, tras la concentración, a una pequeña delegación de representantes de los afectados, que expusieron sus inquietudes y denuncias. Entre ellas, está la tramitación de ‘créditos blandos’, para lo cual el Consistorio ha entrado en conversaciones con las entidades financieras. Esta medida se sumaría a las subvenciones que la Concejalía de Hacienda está otorgando a los comerciantes más afectados, según comunica el primer teniente de alcalde.

El Ayuntamiento ha convocado, el miércoles 11 de febrero, una reunión con esta misma delegación de afectados, técnicos municipales y la empresa constructora. En esta reunión se pretende dar a conocer el proyecto con los plazos definitivos, que esperan que recupere parte de los meses de retraso. En caso de no contar todavía con los datos, se convocarán nuevas reuniones. El Consistorio tratará, además, de mantener una comunicación más fluida con los afectados.

El Grupo Municipal Socialista ha mostrado su solidaridad con la situación de los comerciantes y ha apoyado el acto de protesta. La secretaria general, Raquel Belinchón, critica la falta de información a la que el Ayuntamiento somete a comerciantes y vecinos. La portavoz socialista, Eva Izquierdo estima que la culpable de las molestias es «la falta de planificación, que está agravando con creces» los problemas de por sí previsibles de un trabajo de estas magnitudes.