El uso de la publicidad institucional para premiar o castigar

Qué cansino resulta el tema. Pero es agotador porque al gobierno de Quislant le gusta marear los temas cuando los quiere dilatar. Y eso es lo que ocurre con la publicidad institucional que el Ayuntamiento tiene parada. Primero se la retiró a Diario de Pozuelo. Cuando eso era ya insostenible y a Quislant se le estaban viendo las vergüenzas, decidió retirarla a todos los medios digitales, para no dar la apariencia de vendetta....

Dice una pregunta escrita de Ciudadanos Pozuelo de este mes de septiembre: “En los Plenos de los pasados meses de mayo, junio y julio, nuestro Grupo municipal Ciudadanos preguntó por los baremos técnicos objetivables y profesionales que utiliza el Departamento de Comunicación para realizar la contratación de inserciones publicitarias en los medios de comunicación, obteniendo idénticas respuestas evasivas por parte de la Concejalía de Presidencia. Entendemos –prosigue la pregunta- que ese tipo de respuestas es antidemocrático porque coarta la acción de control al gobierno por parte del principal partido de la oposición, por lo que volvemos a preguntar por este asunto en lo que se refiere a la contratación de una agencia de medios que aplique baremos objetivables y profesionales”.

Y ahora viene la pregunta exacta, certera, de Ciudadanos, con la que intenta que esta vez el gobierno municipal no se zafe: “¿Nos podría decir la Concejalía de Presidencia por qué el Departamento de Comunicación del Ayuntamiento no contrata una agencia de medios que aplique baremos objetivables y profesionales sobre la contratación de publicidad institucional y de campañas, que debe realizar nuestro Ayuntamiento?"

La respuesta de Félix Alba dice: “Como usted ya debe saber por las contestaciones dadas a preguntas efectuadas en otros plenos, se he venido elaborando un acuerdo marco de servicios dirigidos a la compra de espacios en medios de comunicación, para la difusión de campañas de publicidad institucional del Ayuntamiento de Pozuelo de Alarcón. Los trámites necesarios para la puesta en marcha de su contratación están a punto de finalizar. En cualquier caso, he de celebrar que comparta usted el  objetivo de una medida que ya fue tomada hace algún tiempo por el Equipo de Gobierno”.

O sea, que siguen mareando. No es posible tanta inutilidad, tanta falta de profesionalidad. Si esto fuera una empresa privada, ya estarían en la calle todos los responsables de que la regulación de la publicidad institucional llegue a buen puerto.

Eso sí, salvo que el jefe o jefa suprema sea la que esté detrás parando todo. Sería un modo sibilino de ahogar a la prensa local, y después esconder sus cuerpos. Que cuando las decisiones se toman con las tripas vale todo, hasta la extorsión. Que no digo yo que así sea.

Total, creo que la alcaldesa Susana Pérez Quislant ha encontrado un modo de dar publicidad a los afectos: con contratos laborales de 30.998,45 euros.  Así que la contratación objetiva de la publicidad institucional ya puede esperar. Pronto volveré sobre ello.

¿Y si hacemos un concurso para ver quién aguanta más debajo del agua? Cómo le gustan estos jueguecitos a la alcaldesa. ¡Qué Killer....!